Relojes automáticos con calendario perpetuo
Relojes automáticos con calendario perpetuo: un saber hacer excepcional
Un reloj automático con calendario perpetuo es una obra maestra de la relojería de primer nivel. Se trata de una de las complicaciones más sofisticadas que existen. Este complejo mecanismo, cuyo meticuloso diseño requiere varios meses, ajusta la fecha de forma automática para tener en cuenta las distintas duraciones de los meses, incluyendo los años bisiestos, con el fin de indicar de forma precisa el día, el mes y la fecha, independientemente de si el mes dura 28, 30 o 31 días.
Una vez ajustados, los relojes automáticos con calendario perpetuo mantienen la fecha correcta sin necesidad de un ajuste manual, salvo algunas excepciones. Como su diseño se basa en el calendario gregoriano, estos relojes deberán corregirse en 2100, 2200 y 2300, que son años no bisiestos excepcionales.
Calendario perpetuo automático o manual: ¿cuál es la diferencia?
Ambos mecanismos se diferencian, principalmente, en su forma de funcionar: un reloj automático con calendario perpetuo obtiene su energía de los movimientos naturales del usuario. El movimiento de la muñeca mueve un peso oscilante con forma de disco que se encuentra dentro del reloj, convirtiendo así la energía cinética en energía mecánica para dar cuerda a la espiral principal. Este complejo proceso, que implica diversos engranajes y espirales, permite a la espiral enrollarse y liberar gradualmente su energía para mover las agujas, de forma que el reloj indique la hora exacta sin necesidad de intervención manual.
Por otro lado, a un reloj manual con calendario perpetuo se le debe dar cuerda manualmente, por lo general, una vez al día. Si la espiral principal no se enrolla manualmente, el reloj se detiene cuando toda la energía acumulada se haya liberado.
La Maison Jaeger-LeCoultre, fundada en 1833 en el valle de Joux, Suiza, es un referente internacional en relojes de complicación. Gracias a sus extraordinarios conocimientos técnicos y a su control total de la producción, Jaeger-LeCoultre continúa ampliando los límites de la relojería de lujo, ofreciendo relojes automáticos con calendario perpetuo que combinan tradición, innovación y precisión.